Hacía bastante tiempo que teníamos reservadas las vacaciones
de Semana Santa, decidimos irnos a un pueblecito de Lugo. Era una zona que no
conocíamos y pasar unos días de relax y desconexión era justo lo que necesitábamos.
Pero en el último momento, las ganas de sol, playa y un poquito del sur nos
hizo cambiar de idea. Nuestro destino definitivo iba a ser Isla Cristina (Huelva).
Ya habíamos estado por allí pero, nos supo a poco y queríamos investigar otras
zonas. Además, encontramos un hotelito perfecto sólo para parejas que nos
permitía descansar y disfrutar de piscina, playa y mucho descanso.
¡Qué ilusión me hizo desempolvar la ropita de verano! Sobre
todo, el bikini. El día que llegamos hacía un sol espléndido. Parecía que habíamos
dado un pasito hasta el mes de agosto. Sentí una alegría inmensa cuando
llegamos al hotel y vi a todo el mundo tomando el sol y pegándose un chapuzón
en la piscina. Es
el calor… que me encanta.
Nos alojamos en el Hotel Isla Cristina Palace & Spa,
situado en una zona bastante tranquila y con todas las comodidades. Una de mis
preocupaciones cuando llego a un Hotel es la comida… He de reconocer que los
buffets llenos de gente no son mi pasión. En esta ocasión no tuve problema
porque cada día había showcooking en
directo, te cocinaban lo que quisieran en el momento y la verdad que lo
agradezco bastante.
El primer día aprovechamos los rayos de sol que quedaban por la tarde y
hacer un recorrido por el pueblecito pero al día siguiente nos pusimos rumbo al
Algarve Portugués. Los empleados del Hotel, nos recomendaron un pueblecito con
una playa fantástica, Tavira y hasta allí que nos fuimos. Tuvimos que dejar el
coche y pasar en un barquito ¡fue estupendo! Otra zona que visitamos fue Portimao,
nos hablaron de un Centro Comercial impresionante ‘Aquaportimao’ y hasta allí
que nos fuimos, un poco lejos pero mereció la pena.